miércoles, 17 de junio de 2015

Juego de Tripletes

Se consiguió (otra vez)


Escribí mis anteriores posts antes de la consecución de los títulos y esas sensaciones finalmente se han consumado.

Y Luis Enrique consumó el Cambio de Ciclo

FCB vs FCB. Victor Frankenstein vs su criatura



Ese Barça, de menos control pero de más opciones, ha conseguido ganarlo todo, con menos excelencia quizás que su predecesor, pero con más mérito si cabe en tanto en cuanto se ha sobrepuesto a una hostilidad ingente y ha conseguido evolucionar el fútbol de posición a un nuevo estado más incontrolado pero más variable.

Bravo.

 ¿Qué hacemos ahora?


Ahora toca mejorar y la primera gran pregunta es "cómo".

La losa del ban FIFA no facilita la adquisición de jugadores, que se ven avocados a dos opciones: esperar a Enero para debutar (como Aleix Vidal) o encontrar una formula para quedar cedidos en otro club sin disputar competición europea. Complicado.
Si a esto sumamos la celebración de elecciones a mitad de Julio, hecho éste que bloquea potencialmente cualquier decisión hasta la llegada del nuevo presidente, la realidad es que es practicamente imposible poder fichar.

Y la segunda pregunta es "qué".

Nos encontramos con una plantilla exitosa en la que practicamente todos los puestos están doblados y en la que mejorar llevaría implicito sustituir.

Esto pasa en todas las posiciones excepto en la delantera, en la que pese a no doblar posiciones, el tridente fagocita potencialmente cualquier opción de adquisición rutilante y en la que no obstante además de las tres bestias se dispone de Pedro (renovado), se debe contar más con Munir y se puede usar a Vidal como extremo puro.
Por cierto, del tema Deulofeu, veo acertada la venta con opción de recompra. No termina de cuajar y la opinión de todos sus técnicos no es la más favorable. Vale, se vende por 6M; que luego cuaja: costaría sólo 9 (3 más) traerlo de vuelta; que no: pues bueno es ese dinero.

El centro del campo también está cubierto, incluso con la marcha de Xavi.
Busquets tendría como sustitutos a Mascherano, Sergi Roberto o incluso la promoción de Samper. En los interiores, Iniesta y Rakitic podrían descansar con las intervenciones de Rafinha, el propio Roberto y la posible incorporación de Denis Suárez.
Evidentemente la panacea sería encontrar un reemplazo para Xavi, pero eso no es posible. Se habla de Pogba, de potencial brutal pero de características diametralmente opuestas. No entraré en valorar si se adaptaría al fútbol de posición, pero sí en que pagar 90 millones a la Juve y 12 anuales al jugador es bastante innecesario. Que el debate electoral se centre en él me parece desacertadísimo.

La defensa también está nutrida.
En el lateral derecho nos encontramos con Alves, Montoya, Douglas y Vidal, me desprendería de Douglas seguro y Montoya según Vidal se quiera usar aquí o en el extremo (hay que tener en cuenta también que si hasta Enero Alves se lesionase, no habría sustituto).
En el izquierdo haría un poco de cash con Adriano, pues con Alba subiría a Grimaldo y podría usar ahí a Mathieu y Vermaelen.
Y para el puesto de central, overbooking (quién lo diría): Piqué, Mascherano, Bartra (error gravísimo si se marcha), Mathieu y Vermaelen (en plenitud física tiene nivel de titular).

Por último, en la portería, no hay debate, está cerrada. Tan sólo saber si Ter Stegen será ya titular en Liga y UCL o si se mantiene la política rotatoria.

Los Comicios


Hecho un somero repaso deportivo, entramos en materia electorial, sin pretender hastío alguno, pasemos a analizar por encima la presumible lucha Laporta vs Bartomeu. Triplete I y Triplete II en una lucha tri-tranquila y (por desgracia) encarnizada por el sillón de hierro de Aristides Maillol.

Ha vuelto Laporta, un presidente al que tanto debemos por sacar al club de los fondos del mismo Gaspart-averno hasta llevarlo a la cima de Europa, posiblemente el hito más importante en la reciente historia de Barcelona.
En su debe sin embargo hay que anotar cierto mal ojo en muchas adquisiciones: Mario, Quaresma, Rüstu, Hleb, Cáceres, Chygrinskyi, Keirrison, Henrique,...la lista es larga. Aspecto muy mejorable si finalmete Carles Puyol es el director deportivo.
También hace dudar el mero hecho de tener casi contratado a José Mourinho antes de decidirse por Guardiola.
Sus tres lemas de campaña son:
- Cruyff, vale, pero como modo de entender el juego y, en lo personal, sólo como asesor, por favor, no con poder activo de decisión. Es evidente que los cimientos del equipo están sustentados en su filosofía de juego, pero no vayamos más allá, sus consejos en ocasiones no son del todo acertados
- Unicef, muy bonito y loable, pero para competir con el resto necesitamos TAMBIÉN patrocinio.
- Catalunya, siempre que sea como elemento unificador e integrador y no excluyente.
El tema de los desmadres y fiestas del bueno de Jan, lo dejaremos en meramente anecdótico.

Y al otro lado del ring está Bartomeu, el no-electo cuyo gran punto fuerte ha sido llevar a un enorme éxito deportivo a un equipo en el que la paz parecía imposible, teniendo la decencia de convocar elecciones en un momento clave. Esta directiva, al contrario que la anterior, heredó el mejor equipo de la historia, casi lo destruye, pero ha acabado convirtiendolo en una potencia enorme.
Los fichajes de esta junta, salvo en el irritante caso de Douglas y el "rendimiento inmediato" de Vermaelen, se pueden considerar un éxito. Conseguir reunir a Suárez, Messi y Neymar (dinero aparte), es un lujo sin parangón. El rendimiento del resto, fundamental.
En este aspecto, todo el tema Zubizarreta es bastante desconcertante y la adquisición de Roberto Fernández para esas funciones casi lo mismo.
Como puntos negativos está evidentemente el tema del fichaje de Neymar, el ridículo judicial con el asunto del fichaje de menores y el ban FIFA (en general, la perdida de relevancia institucional), la "prostitución" para con Qatar, el catastrófico descenso del Barça B e, igualmente, la cercanía del olor a Rosell (y sus Nike y Brasiles).
En resumen, la pregunta es, ¿de no ser por este triplete, sería rival para Laporta?

En mi opinión, el socio elegirá al menos malo, pues ambos tienen cosas susceptibles de bastante crítica analizable, y veremos qué pasa. Lo que no es recomendable es, tal como se percibe en la realidad paralela de Twitter estos días, llevar esta disputa a una guerra sangrienta en la que todo vale. La masa social debe ser capaz de eliminar ismos, no todo es blanco o negro (un claro ejemplo es el tema Cruyff), estamos en la cima deportiva (que no institucional), el objetivo debe ser que estas elecciones construyan, que unan y no separen.

Saludos

No hay comentarios:

Publicar un comentario